Nuestra protagonista es Lauren Rosenberg, quien decidió dar un paseo siguiendo las instrucciones de Google Maps en su BlackBerry, y en un momento dado, el sistema le propuso dirigirse a la calle Deer Valley, que según parece, no cuenta con acera ni arcén, y como puedes imaginar, no transcurrió mucho tiempo antes de que fuera atropellada por un vehículo que no pudo esquivarla.
Hasta aquí, nada que nos sorprenda en exceso. La noticia salta cuando Rosenberg decide demandar a Google y solicitar una indemnización de 100.000 dólares (81.590 euros). De nada parece que va servir a Google el aviso de que el servicio está en 'beta' y que puede haber 'impreciones'. No sabemos cómo acabará la historia, pero como siente un precedente, ya estamos viendo a Google revisar toda la cartografía navegable del país.
Via Engadget
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